Mi nombre es Ana Najas y desde 2018 llevo transitando este despertar. Desaprendí todo lo aprendido y desde entonces lo observo todo desde la mirada interior; más consciente y más presente.

«Sentir los cambios del cuerpo, percibir el flujo de energía recorriéndolo. Observar como se abren nuevos espacios. La reeducación del cuerpo poniendo el alma. Desde el amor universal. Esto es el yoga para mí»

Creé Ksharma yoga después de un viaje a la India, donde me formé como profesora de Hatha yoga en Rishikesh. Empecé cuestionarme mi ritmo de vida y mi trabajo de aquel entonces. Dedicarme a compartir la filosofía yóguica y la meditación era algo que me latía muy fuerte en el corazón, los caminos de la vida siempre me han devuelto al yoga y su filosofía así como a la reflexión y al auto conocimiento.

«La palabra Ksharma nació desde el deseo de crear una palabra que definiera mi mundo interior. Es la unión de dos palabras sánscritas que abarcan todo lo que significa para mi el ser y el estar. KSHAMA en el hinduismo significa  paciencia, tolerancia y el perdón; paciencia e indulgencia para poder perdonar y olvidar. KARMA quiere decir que toda acción, pensamiento o palabras que salgan de ti, vuelven a ti»